De “Casados Heterosexuales” a: ¡SOLTEROS HOMOSEXUALES!

En alguna etapa de nuestras vidas, hay momentos que nos puede proveer de cantidades superlativas de experiencias sexuales, y todos -solteros o casados- somos proclives a buscar aquello que nos gusta, que nos dé morbo, y/o que de alguna manera hemos mantenido escondido en lo más profundo de nuestro ser.

Es por ello que en los portales de contactos gays, se ven anuncios del tipo, “Casado heterosexual busca hombre para sexo discreto…” ante eso, cualquier gay sonríe y piensa que éste hombre es un bisexual que no se reconoce como tal, o bien un homosexual reprimido que tuvo que crear por presión social y/o familiar, una careta con la cual esconder sus gustos y placeres sexuales.

Desde siempre a muchos gays, el heterosexualismo los ha llevado al punto de negar su propia realidad. La familia y el “qué dirán” los hacen formar “familias de apariencia” que una vez formadas, y habiendo cumplido con la norma social, se sienten en libertad de llevar conductas sexuales clandestinas con otros hombres, que al fin al cabo son los que les proporcionan placer. Conductas que al ser repetitivas constantemente, al cabo de un tiempo, les forma una crisis personal que los puede llevar a la más profunda depresión y quedarse perdido e incomprendido sin saber qué rumbo tomar.

Pero en la actualidad, en muchos países existen diversos espacios de desarrollo para homosexuales, lo que conlleva a que muchos decidan salir del armario. Aunque claro, ese armario se encuentra dentro de un hogar constituido por él, su cónyuge femenina y en algunos casos, los hijos. Aun así, están decididos a luchar contra todo y hacer su vida como ellos desean. En contraparte, otros tienen que salir con el armario a cuestas, expulsados por la ventana del hogar, ya que a la corta o larga, logran ser descubiertos.

Y si bien, el que sale por su cuenta tiene más vitalidad a enfrentar su nueva realidad, de áquel que es expulsado, ambos se encuentran en nuevo territorio, “El ambiente Gay” donde serán “estratificados” de acuerdo a su apariencia, tenencia, sus orígenes y/o antecedentes.

Ya de hecho, hay muchas personas que sienten frustración ante su esfuerzo por desarrollarse y buscar una estabilidad con otra persona de su mismo sexo.

Si todos sabemos que la vida no es fácil para nadie, ¿Ellos lo tienen más difícil?

Si en la vida tenemos dos opciones de elegir, aquello que nos gusta o aquello que nos conviene, ¿Que les convendría a estas personas?