Amigos con Derechos o Follamigos

Para nadie es un secreto que el buen tiempo hace que aumenten los niveles de testosterona (deseo sexual). Además, la serotonina y las endorfinas que controlan la sensación de placer pueden aumentar por estímulos diversos. Por tanto, hay una predisposición mayor de liberación de estas hormonas de una manera natural, pero en el frío tambien se siente deseo, sentir el calorcito de un cuerpo viene mejor que una estufa.

Muchos solteros y otros que no lo son, comienzan a evocar recuerdos de la pasada temporada estival, sobre todo por determinadas personas con quien compartimos momentos sexuales placenteros. Si bien con algunos no se mantendrá contacto, siempre nos quedará siquiera uno de quien se conserva el teléfono móvil para momentos concretos. Surgen así los “follamigos” o “amigos con derecho” en inglés FWB: “friends with benefits”, personas con las cuales podemos contar para ratos de placer sexual. 

 Las ventajas de tenerlos, llegan desde el sexo sin compromiso,  a contar con una pareja sexual eventual de confianza. Desde un amante hasta alguien para “aparentar” ante los demás que hemos ligado y presumirlo en fiestas, eventos, cenas, entre otros. Pero también tienen sus desventajas, como el desarrollo de sentimientos románticos (que ponen en riesgo la amistad), la falta de compromiso para las citas y/o sentir remordimientos, en el caso de las personas con pareja.

Hay muchos “follamigos” -en adelante FWB- que mantienen su relación durante mucho tiempo, como otros lo son para temporadas concretas, independientemente de su duración. Pero el porcentaje de que una relación de este tipo se convierta en una pareja estable son mínimas., a posteriori pueden continuar siendo amigos pero sin sexo o tomar cada uno rumbos distintos  Eso sí no todos los FWB son iguales dentro de la diversidad sexual masculina, algunos de los tipos mas comunes son:

FWB entre Gays Jóvenes Solteros.

Todos los hemos tenido en algún momento de nuestra vida. Se dan de manera inesperada y se disfrutan. Dígase que el factor sorpresa está asegurado, dándole mas morbo al primer encuentro que desencadena otros más. No existe la exclusividad y pueden dejar de verse sin darse explicaciones.

FWB entre Gays Maduros Solteros.

Ambos son conscientes de lo que viven y no van con parámetros rígidos en principio. La sensatez de estos encuentros es total, aunque la exclusividad puede resultar siendo media, al esperar inconscientemente un poco más de seriedad el uno del otro. Aún así las posibilidades de entablar una relación estable son altas.

FWB entre Gays Maduro-Joven Solteros.

A muchos gays jóvenes el tener un “follamigo” maduro les encanta por lo que puedan descubrir y experimentar. Para el maduro, el joven es un bocado que no se puede despreciar, aunque hayan excepciones. La exclusividad es media, y puede generar a mediano plazo una fuerte dependencia sexual y emocional por ambas partes. La opción de una relación entre ambos tambien tiene buenas posibilidades.

FWB entre Gay Casado o con Pareja y Gay Soltero. 

Puede que el principal motivo de unión de estos “follamigos” sea un pasado en común. Quizá fueron novios o amantes antes de que uno de ellos decidiera tener pareja. Es casi una relación idílica, pero puede remover viejas heridas. Si no hay pasado en común, quien tiene pareja solo buscará momentos de placer extras a su relación y el soltero solo disfrutar. 

FWB entre Gays Casados o con Pareja.

La rutina e insatisfacción originan que muchos deseen otra persona, pero sin querer dejar a sus respectivas parejas. Y como es muy arriesgado ir ligando con uno y otro, se busca un amante fijo y debe tener pareja preferentemente. La exclusividad es total, aunque en ese total se incluyan eventuales escenas de celos por cuestiones de tiempo y espacio.

FWB entre Bisexual Casado o con Pareja Femenina y Gay Soltero.

Más común de lo que se piensa, aquí el bisexual tiene que buscar como “escaparse” de su pareja femenina para no ser descubierto. Por ende los encuentros no suelen ser de más de tres horas en el piso del “folllamigo” masculino. Por lo general a la hora de la comida y entre semana, nunca findes o festivos. No hay exclusividad, de sentirse presionado el bisexual abandonaría el barco inmediatamente.

FWB entre Bisexuales.

Por su complejidad es quizá una de las más antiguas en la diversidad sexual, aún cuando no había término que la defina. Da igual si uno o el otro tiene pareja femenina o no. Ambos desean desatar sus deseos a cuatro paredes y seguir dando una imagen heterosexual ante los demás. Si ambos coinciden en la idea de tener una familia con una mujer, es muy probable que afianzen su amistad incluyendo en su momento a sus respectivas parejas femeninas. Y es que su única noción para formar pareja es sólo con una mujer y jamás con un hombre. La exclusividad existe pero sin presiones.

Para muchos tener un “follamigo” es lo mismo que tener un amante fijo, pero no es así. La volátilidad de los FWB hace que cualquiera pueda dejar de verse sin motivo aparente, sin dar explicaciones y sin pedir nada a cambio. El amante en cambio está disponible porque obtiene algo o espera obtenerlo. Pero muchos gays no saben distinguirlo formándose una vorágine de expectativas que al tiempo acaba por mellar en su autoestima, de la misma manera -o quizá aún mas dolorosa- como si una pareja sentimental los hubiese dejado.

Y tu Prefieres Amigos con Derechos o un Amante permanente??? 

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